La llegada de una ola de calor siempre nos provoca cierto desasosiego relacionado con el bienestar de nuestra mascota. Una hidratación adecuada, nada de cortar el pelo en exceso y una correcta planificación de los paseos, son algunos de los 6 consejos para que nuestro perro lleve mejor las altas temperaturas.

Cuando se produce una ola de calor son muchos los dueños de perros y gatos que quieren saber cómo pueden ayudar a su mascota a sobrellevar las altas temperaturas. En este sentido surgen dudas a la hora de planificar los paseos y si es necesario adaptar o modificar la dieta para adecuarla al clima. 

Siempre hay que tener en cuenta que los animales están mejor preparados que nosotros para soportar todo tipo de temperaturas. Para ello tienen una piel más gruesa, una capa de grasa bajo la dermis y su pelaje les protege tanto del frío como del calor. 

Sin embargo hay razas más adaptadas al frío y que por esta razón toleran muy mal el calor y que requieren más cuidados. Para estos, y todas las razas, os dejamos 6 consejos para que nuestro perro lleve mejor las altas temperaturas.

Consejos para que nuestro perro lleve mejor las altas temperaturas

1. Cuando pasear al perro

Aunque depende en gran medida de la zona donde vivamos, ya que no es lo mismo el calor en el norte de España que en Andalucía o en pleno centro de una gran ciudad o a en una zona de campo, de forma general hay que evitar sacarles a la calle durante las horas más cálidas para evitar quemaduras, sobrecalentamientos y problemas respiratorios, especialmente cuando se trata de ejemplares de pelo largo o de ejemplares braquicéfalos (razas chatas).

En este sentido debemos seguir la regla de los cinco segundos. Esta regla dice quesi extendemos la manos sobre el suelo y somos capaces de aguantar cinco segundos sin quemarnos, la temperatura es adecuada para que el perro pueda pasear. 

Si nosotros no lo aguantamos es que el suelo está demasiado caliente para caminar.

2. Qué hacer para aliviar el calor de nuestra mascota

Aunque la época de calor son unos meses complicados para personas y animales, hay algunos trucos que ayudan a combatirlo. El más sencillo es ofrecer alimentos o bebidas frías, por ejemplo poner cubitos de hielo en el agua o preparar caldos o gelatinas de caldo y congelarlo para ofrecerlo como juguete o chuche.

Actualmente hay también colchonetas refrescantes que ayudan a bajar la temperatura corporal y se pueden mojar con agua la tripa, la cara o las patas para refrescar el cuerpo. 

Igualmente ofrecer refugios oscuros puede ayudar y si queremos poner aire acondicionado es importante no colocar el flujo de aire directo hacia el animal o hacerlo con baja potencia y una temperatura media.

3. Cortar o no cortar el pelo

Salvo que esté indicado por alguna patología concreta, de forma general es preferible no cortar el pelo (o al menos no rasurarlo) durante la época de más calor. Esto se debe a que el pelo crea una capa de aire junto a la piel que la protege del calor. 

Además, el pelo actúa como protección frente a los rayos UV evitando con ello las quemaduras de la piel, especialmente en los animales de piel rosada.

4. Qué dieta seguir con el calor

Al igual que ocurre en las personas es muy importante que los perros y gatos aumenten la ingesta de líquidos. En los perros esto es relativamente sencillo, ya que tienden a beber bastante agua si tienen un bebedero limpio y fresco. Debemos cambiarla varias veces al día y podemos poner hielo dentro para mantenerla fría. 

En los gatos esto se complica ya que por naturaleza son malos bebedores. Esto puede solucionarse de forma eficaz colocando varios bebederos en distintos puntos de la casa, cambiando el agua frecuentemente, usando fuentes específicas para gatos y ofreciendo a diario comida húmeda como latitas o sobres.

5. Qué animales son más sensibles al calor

Los animales más sensibles son aquellos que salen a la calle o viven en naves o fábricas, ya que son los que soportan temperaturas más altas sin posibilidad de refrescarse. Dentro de los animales que viven en nuestras casas los ejemplares de pelo largo, adaptados a climas más fríos, son los que peor toleran el calor. 

6. Cómo actuar ante un golpe de calor

El golpe de calor es una reacción de shock que sufre un animal cuando su temperatura supera el límite que permite que su cuerpo termorregule. Los síntomas van desde desmayos o pérdida de consciencia hasta vómitos, aumento de la frecuencia cardíaca, convulsiones o coma. Si no se actúa a tiempo puede desembocar en la muerte del animal.

Ante la sospecha de que la temperatura de nuestra mascota esté subiendo debemos mojar con agua fresca las zonas sin pelo para reducirla. Si nuestro compañero ha sufrido un golpe de calor es importante bajarla poco a poco, ya que si sumergimos al animal en agua fría la diferencia de temperatura puede causar un shock térmico con consecuencias graves.

Otras noticias sobre mascotas recomendadas por Madrid en Tercera que te pueden interesar: